El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha renovado el convenio del Gobierno regional con siete entidades financieras para que los agricultores y ganaderos de Castilla-La Mancha accedan a créditos puntuales en condiciones ventajosas.
Francisco Martínez Arroyo, ha renovado el convenio del Gobierno regional con siete entidades financieras para que los agricultores y ganaderos de Castilla-La Mancha accedan a créditos puntuales en condiciones ventajosas, con euríbor al +0,8, “dado el éxito de las anteriores convocatorias y para facilitar liquidez al sector más vulnerable de la cadena agroalimentaria, una vez superadas las consecuencias de la pandemia de la Covid-19 y en un contexto internacional bélico internacional por la Guerra de Ucrania”.
Así lo ha señalado el consejero asegurando que, “pese a todos los obstáculos”, se ha conseguido que se mantenga el interés más bajo posible, el mismo que se fijó en 2016, cuando se firmó este protocolo. El objetivo es facilitar a los titulares de explotaciones agrícolas y ganaderas el acceso a la financiación en condiciones especiales que les permita su incorporación a la actividad agraria y ganadera como forma de incentivar el relevo generacional que precisa el campo, así como para la ejecución de inversiones agrarias.
Este convenio ha sido renovado con las entidades financieras Banco Santander, Eurocaja Rural, Globalcaja, CaixaBank, BBVA, Ibercaja y Cajamar.
Martínez Arroyo ha destacado que “los agricultores y ganaderos siempre pagan, siempre devuelven el dinero y esto es muy difícil de decir en otros ámbitos de la economía”.
Asimismo, ha insistido en que los profesionales del sector primario “son aquellos que siempre cumplen y, por tanto, este convenio es más fácil para las entidades financieras, que han hecho un esfuerzo para firmar los requisitos de estos préstamos y es muy bueno para los agricultores y ganaderos que van a contar con liquidez, sabiendo que la profesionalidad y la resiliencia del sector, desde luego, les va a permitir devolverlo con solvencia”.
En esta ocasión, podrán beneficiarse de las condiciones recogidas en el protocolo los préstamos que se formalicen por los beneficiarios de las ayudas a la creación de empresas por jóvenes agricultores, al apoyo a las inversiones en explotaciones agrarias, a los que hayan solicitado un Plan de Mejora, y a determinadas inversiones dentro del Plan de Recuperación, fundamentalmente, para la digitalización de la actividad agraria.
Para Martínez Arroyo, “las fortalezas del sector agrario regional están por encima de los riesgos en Castilla-La Mancha” y ha señalado que “crecemos por encima de la media” en España. “Creo que esa estabilidad y esa certidumbre, que siempre menciona nuestro presidente, Emiliano García-Page, se pone más de manifiesto que nunca en un convenio como éste con las entidades financieras para el sector agrario”, ha manifestado.
Por parte de las entidades financieras han rubricado este protocolo Lorena Ruíz, por Banco Santander; Juan Ramón Martínez, por BBVA; Jaime Campos, por CaixaBank; María Luisa Salido por Cajamar; Miguel Ángel Escalante, por Eurocaja Rural; Alberto Marcilla, por Globalcaja y José Antonio Pascual por Ibercaja.
El consejero ha estado acompañado en esta rúbrica por el viceconsejero de Medio Rural, Agapito Portillo; la secretaria general técnica de la Consejería, Juana Velasco; y el director general de Desarrollo Rural, José Juan Fernández.
La Ley de Agricultura Familiar, más cerca
Precisamente, a este equipo de la Consejería que le acompañaba, Martínez Arroyo ha agradecido “la celeridad” en el desarrollo de la Ley de Agricultura Familiar, cuyo anteproyecto ya cuenta desde este martes con el visto bueno del Consejo de Gobierno, trámite previo al envío a Consejo Consultivo, para que esté aprobada antes de que termine la legislatura por las Cortes de Castilla-La Mancha.
En esta materia, el consejero ha trasladado el mensaje de que “aquel que tenga una explotación familiar va a contar con una ventaja en el acceso a todas las ayudas de la Consejería de Agricultura, respecto a un modelo que no compartimos en Castilla-La Mancha, que es el de la ‘uberización’ del campo, ese modelo en el que los fondos de inversión sustituyen a nuestros agricultores y ganaderos”.
De esta forma, Martínez Arroyo se ha mostrado rotundo en la protección de las empresas familiares principales del medio rural y ha añadido que “no queremos esto, sino que queremos un modelo de explotación familiar y, por eso, la Ley que presentamos”, ha aseverado.
Además de la priorización en todas las líneas de ayuda a las empresas de los agricultores y ganaderos, cuyos ingresos supongan al menos el 50 por ciento provenientes del sector agrario en la unidad familiar, la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural colaborará también con las administraciones públicas competentes en materia de agua para que se priorice a las explotaciones familiares agrarias en la gestión de los ‘Bancos públicos de agua’ que se puedan crear en las diferentes cuencas hidrográficas, tales como el Consorcio del Alto Guadiana que están impulsando los gobiernos de Castilla-La Mancha y de España, a través del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.
Medidas que llegan, además, según ha dicho el consejero, “en un momento en el que los agricultores y ganaderos han afrontado situaciones de dificultad, consecuencia de la pandemia que hemos vivido y consecuencia, sobre todo, en este último año de la Guerra en Ucrania y de las crisis de energía, de combustibles, de medios de producción”.
En este sentido, ha concluido asegurando que “un sector como el nuestro, que ha sido tan resiliente, merece que hagamos ese esfuerzo desde el Gobierno de Castilla-La Mancha”.