Información rigurosa, crítica razonada y puntualidad (con permiso de la pandemia). Podría ser un resumen de la filosofía de la revista PlanetAvino, que su director resume con una frase: respeto al lector. Así ha conseguido llegar al número 100.
La actualidad del vino ha pasado por la revista a lo largo de 100 números, que corresponden a 101 bimestres ya que la pandemia obligó en 2020 a hacer cinco entregas en lugar de seis. Los meses pares, en los primeros días, se cumple la cita puntual con la información vinícola especializada, servida por un equipo que cuenta con las mejores firmas del sector. Un plantel que demuestra que la crítica no ha muerto, sino que está más viva que nunca, aunque le falten medios de comunicación para expresarse.
La editorial, que lo es también de la Guía Proensa (también ha celebrado número redondo: en 2022 llega a su vigésima aparición anual) y de un número monográfico anual, no ha querido hacer un recorrido por la historia de la publicación, ni ha pedido a sus amigos que le den palmadas en la espalda. En línea con su filosofía informativa, ha preparado dos temas destacados. El principal está dedicado a informar sobre el epílogo de una serie de temas que fueron noticia en estos años y que tal vez quedaron inconclusos en su información.
El otro, titulado La cima de España, es una especie de continuación del reportaje aparecido en el primer número, La cima del mundo. Si aquél destacaba el mejor vino de una serie de países destacados del mundo, en este se mira hacia el interior, a los mejores vinos de cada una de las comunidades autónomas, excepto una.
Además, se incluye una crónica en la que se resume la evolución habida en los perfiles generales del vino español en estos casi veinte años. Tiene el complemento imprescindible de la sección Saber Más, de José Hidalgo Togores, en la que se analiza la evolución técnica en viñedos y bodegas y se apuntan los caminos del futuro cercano.
Las concesiones al ego de la publicación se limitan a una presentación desenfadada de todo el equipo que la hace posible y a una selección de títulos destacados en las más de doscientas reseñas que han conformado la sección Libros. El título, Querencia por Gutenberg, también es toda una declaración de principios de una publicación que, como las otras de VadeVino Editorial, mantiene su preferencia por el papel impreso. La sección De vinos por…, dedicada a los bares de vinos de una ciudad concreta, abre el foco a una selección de los más destacados de España.
Se completa la publicación especial, con 124 páginas, el doble de lo habitual, con las secciones de opinión, Estrenos (se cuentan más de mil los nuevos vinos reseñados en cien números de la revista), Libros, Noticias y Pistas. Y una separata, casi como otra revista, dedicada a los Índices de contenidos de los noventa y nueve números publicados.