Suecia puede ser un país interesante para las bodegas españolas por diversos motivos, uno de ellos es el creciente interés de los consumidores suecos por la cultura, el turismo, la gastronomía y los vinos españoles, según un estudio publicado por el ICEX.
El 44% del total de bebidas alcohólicas que se consumieron en Suecia en 2022 fue vino. Desde 2016 España ha ido recuperando cuota de mercado, situándose en 2021 en tercera posición del ranking de ventas, con una cuota del 10,25%, detrás de Francia, con una cuota del 31,26%, e Italia ,con el 21,97%.
En Suecia existe un monopolio público de venta detallista de bebidas alcohólicas, el Systembolaget, que en el 2022 fue el responsable del 70% de las ventas totales de bebidas alcohólicas en Suecia. Su oferta es amplia con un surtido fijo superior a las 2.500 referencias procedentes de más de 40 países, un surtido temporal y un surtido disponible bajo pedido. Como publica el informe del ICEX “el actual proceso de selección de productos de Systembolaget consta de varias etapas, desde un primer análisis de mercado sueco y tendencias mundiales del sector, pasando por una estrategia de lanzamiento, planes de lanzamiento y licitaciones disponibles para todos los proveedores registrados, hasta la elección del producto final a través de una cata a ciegas”.
El mercado sueco de bebidas alcohólicas cuenta con tres grandes canales de distribución: la venta minorista (monopolizada por el Systembolaget), el canal HORECA y el comercio transfronterizo (compras en los duty free). Aunque hay otros canales de menor importancia, como las tiendas de comestibles, que pueden vender bebidas alcohólicas con una graduación menor al 3,5%, para las bodegas españolas que deseen entrar en este mercado, los dos canales más interesantes son Systembolaget y HORECA, para ambos es imprescindible la figura del importador, según indica el estudio del ICEX.
El estudio señala la importancia del vino espumoso y del vino Bag-in-Box en los últimos años, ya que son las tendencias que más están creciendo en el mercado sueco.
Los consumidores suecos buscan, junto a la sostenibilidad, la comodidad y la conveniencia, algo que el vino Bag-in-Box aporta. En cuanto a los vinos espumosos, estos ya no se beben solo en ocasiones especiales y están quitándoles protagonismo al champán y al cava por ser más económicos.
Como conclusión, el estudio indica que Suecia puede ser un país interesante para las bodegas españolas, ya que al no producir vino tiene que importar todo el que se consume. Además, el monopolio público tiene interés en ofertar la máxima variedad posible en su gama de productos, renovando constantemente su surtido y solicitando vinos diferentes en sus licitaciones.
Además, el consumidor sueco, en los últimos años, ha mostrado un gran interés, con carácter general, por la cultura vitivinícola y gastronómica, y de manera específica por la cultura, el turismo, la gastronomía y el vino español. “El alto poder adquisitivo del ciudadano medio sueco, unido a su interés vinícola y a la buena percepción de nuestro país convierten a Suecia en un mercado de valor, subraya el estudio, El mercado de vino en Suecia, realizado por Ana Martínez Alonso, bajo la supervisión de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Estocolmo y publicado por el ICEX.