El 16 de octubre, la Comisión propuso por primera vez medidas para evitar la contaminación por microplásticos debida a la liberación involuntaria de gránulos de plástico (“granza”).
En la actualidad, cada año se liberan en el medio ambiente entre 52 y 184 toneladas de gránulos de plástico debido a la mala gestión a lo largo de toda la cadena de suministro. La propuesta tiene por objeto garantizar que todos los operadores que manipulan gránulos en la UE adopten las medidas preventivas necesarias. Se espera que esto reduzca la liberación de gránulos en hasta un 74 %, favoreciendo ecosistemas más limpios, contribuyendo a que los ríos y océanos no contengan plástico y reduciendo los posibles riesgos para la salud humana. Las medidas comunes a escala de la UE también contribuirán a la igualdad de condiciones para los operadores.
Hacer frente a las pérdidas de gránulos evitables
Los gránulos de plástico son una de las mayores fuentes de contaminación involuntaria por microplásticos. La Comisión propone hoy que los operadores actúen con el siguiente orden de prioridades: prevención para evitar derrames de gránulos; contención de los gránulos vertidos para garantizar que no contaminan el medio ambiente; y, como opción final, limpiar tras un vertido o un derrame.
La propuesta incluye lo siguiente:
– mejores prácticas de manipulación para los operadores: en función del tamaño de la instalación o de la actividad de transporte, los operadores tendrán que atenerse a ciertas prácticas de manipulación específicas. Estas medidas ya han sido aplicadas por algunos pioneros;
– certificación obligatoria y autodeclaraciones: para ayudar a las autoridades nacionales competentes a verificar el cumplimiento, los operadores de mayor tamaño deben obtener un certificado expedido por un tercero independiente, mientras que las empresas más pequeñas deben hacer autodeclaraciones de conformidad;
– una metodología armonizada para estimar las pérdidas: los organismos de normalización elaborarán una metodología armonizada para ayudar a los operadores a controlar sus pérdidas y subsanar algunas de las lagunas de datos que aún persisten. También debería aumentar la rendición de cuentas al incrementar la sensibilización sobre los efectos de las diferentes prácticas en el medio ambiente y la salud humana;
– requisitos menos estrictos para las PYME: dado que la cadena de suministro de gránulos incluye una gran proporción de pymes, se aplicarán requisitos menos estrictos, especialmente a los microoperadores y a los pequeños operadores.
Próximas etapas
La propuesta de la Comisión de un Reglamento relativo a la prevención de las pérdidas de gránulos de plástico será debatida ahora por el Parlamento Europeo y el Consejo. Todos los operadores económicos, tanto de la UE como de fuera de la UE, tendrán que cumplir los requisitos establecidos en el presente Reglamento en un plazo de 18 meses a partir de su entrada en vigor.
La Comisión seguirá trabajando en la reducción de la contaminación por microplásticos, también en el contexto de la aplicación de la legislación vigente y futura sobre productos y residuos y liderando los esfuerzos mundiales para poner fin a la contaminación por plásticos.