El 70% del empleo es femenino, el 50% de las mujeres ocupan puestos de dirección y casi el 50% son dueñas de sus propias tiendas.
El empleo en el sector de la distribución alimentaria es mayoritariamente femenino; además, es igualitario en términos de responsabilidad en la empresa y fomenta el emprendimiento de la mujer. Estas son las tres principales características que configuran el perfil de la empleabilidad de mujeres en supermercados y distribución mayorista.
En el Día Internacional de la Mujer, ASEDAS (Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados) ha recopilado las principales cifras que dibujan un sector muy feminizado, en el que el 70% de los empleos son ocupados por mujeres. De ellos, como media, aproximadamente el 50% son puestos de dirección, entendiendo por esto cargos de responsabilidad de administración de equipos, que van desde la alta dirección a responsables de área, de plataforma o de tienda. Si sumamos personas con competencias técnicas y capacidad de decisión, pero sin equipos a su cargo, el porcentaje se incrementaría.
Por último, un dato significativo tiene que ver con las mujeres emprendedoras, que son dueñas de sus propias franquicias o cooperativas. El porcentaje en este ámbito se sitúa en cerca del 50%. La distribución de alimentación es, así pues, un sector que facilita el emprendimiento femenino y es especialmente significativo en áreas rurales, donde se convierte en un factor de vertebración territorial y fijación de población. En 2022, las nuevas franquicias generaron más de 2.000 empleos, siendo el 20 por ciento de estas nuevas aperturas en el medio rural.
Las empresas de supermercados y la distribución mayorista han hecho en los últimos años una apuesta muy importante por llevar a cabo iniciativas de promoción interna y de incorporación de mujeres a puestos directivos desde la idea de establecer mecanismos para detectar el talento en condiciones de igualdad e independientemente del área de trabajo -almacén, tienda o gestión-.
En los próximos años se va a seguir avanzando en esta línea gracias a la promoción de las mujeres que han alcanzado ya puestos de mando intermedio.
“Los avances en materia de igualdad de género son palpables en las empresas de distribución alimentaria donde -independientemente de la aplicación de planes de igualdad y protocolos de prevención del acoso- la calidad del trabajo-contratos estables, sueldos igualitarios, diversidad de perfiles…- es un factor que fomenta en sí mismo el trabajo en condiciones de igualdad y la promoción del talento femenino”, dijo Nuria Cardoso, directora de Comunicación de ASEDAS.